Estimados compatriotas, amigas y amigos de Italia, otro año vivido juntos en Chile llega a su fin.
Para mí y el resto del equipo de la Embajada, ha sido un año muy intenso, lleno de compromisos, desafíos y metas logradas.
Con entusiasmo y emoción recibimos en Valparaíso al Buque Escuela Amerigo Vespucci, que llegó por primera vez en su historia a Chile, y celebramos en Viña del Mar el Día de las Raíces; tuvimos la visita de la Subsecretaria de Asuntos Exteriores, Maria Tripodi, y del Director General para los Italianos en el Exterior y Políticas Migratorias, Luigi Vignali. Organizamos eventos de promoción del Made in Italy, de las tradiciones y de la cultura italiana, desde la primera edición del paseo ciclista italiano hasta las celebraciones de la IX Semana de la Cocina Italiana en el Mundo, festejada junto a ustedes en el Barrio Italia de Providencia. Tuve la oportunidad de conocer otras comunidades italianas del país en Concepción, La Serena y Copiapó, además de regresar a Capitán Pastene. Y, paralelamente, continuó el trabajo cotidiano: el del equipo de la Cancillería Consular, dedicado a la asistencia a los compatriotas y servicios para los usuarios; el de la promoción de las relaciones políticas y comerciales, en colaboración con ICE y CAMIT; y el de la promoción cultural, llevado a cabo gracias al constante compromiso del Instituto Italiano de Cultura. En todo lo que hacemos, lo que nos inspira es la lealtad a la República, el sentido de las instituciones, el servicio a la ciudadanía y el propósito de fortalecer cada vez más las relaciones entre Italia y Chile en todos los niveles.
Este seguirá siendo nuestro objetivo también para el próximo año.
Incluso frente a las dificultades que enfrentamos diariamente, la unidad es el recurso al que podemos y debemos recurrir para superar los desafíos que, como individuos y como sociedad, encontramos en nuestro camino. Una unidad que no es un regalo, sino algo que debemos construir con esfuerzo. Y entonces, el mejor deseo que puedo dirigirles a ustedes y a sus seres queridos es que este sentido de unidad nos acompañe al cerrar este año con serenidad y, sobre todo, al afrontar el 2025 que ya está a las puertas.
Valeria Biagiotti,
Embajadora de Italia